Escondida detrás de mi mirada
Pretendía que no vieras que te observaba
Mientras bajabas sin darme cuenta tu mirada
Y la acercabas tímidamente a la mia..
Fueron noches de insomnio y de pasión,
Días renovados por la esperanza de volver a amar,
Cambiaron nuestros destinos al vernos a los ojos,
El universo se puso de acuerdo para regalarnos un amor.
Tuvimos esa loca idea de poder cambiar el mundo con las manos,
Nos persiguieron las ganas de no escuchar las advertencias y mandar a todos al demonio,
Nos amarraron las caricias a creer que podíamos forjar un nuevo camino,
Tiramos pétalos al cielo prometiendo un amor para siempre.
Nos citamos en lugares y tiempos, en espacios y aromas,
En destinos y en casualidades, …
La vida nos acompañaba como cómplice a vivir el amor una vez,
Sentí que de repente todo podía estar verdaderamente bien..
Éramos locos ciegos enamorados de un camino,
Sordos que no escuchaban advertencias,
Mudos que no necesitaban hablar para expresar un sentimiento,
Éramos el amor convertido en uno solo.
Nos llevamos recuerdos, risas y lágrimas
En los bolsillos, nos regalamos razones para tener sueños,
Nos entregamos una vida acabada y forjamos una nueva por comenzar,
Nos tomábamos de la mano para arriesgarnos a ganar.
El miedo fue razón de insomnio en las noches de ensueño,
La vergüenza de ser rechazados no nos importaba a ninguno,
Éramos la joven belleza cristalina de un amor que no escondía
Rencor ni envidia, de un amor que sin duda duraría toda una vida.
Habíamos tropezados en circunstancias poco comunes,
Y lo poco común lleva siempre a una sospecha,
Despistamos las sospechas ignorándonos de día,
Perdimos momentos lindos bajo el manto de unas noches.
No nos mirábamos a los ojos cuando había alguien cerca,
Yo abría mi libro y simulaba leerlo,
Tu sacabas tu guitarra y sin importancia rasguñabas sus cuerdas,
Se nos escapaban las miradas sin querer de los ojos.
Los miedos y las palabras, la maldad y la envidia,
Nos obligaron a planear una vida que guardara caras diferentes
Cada día, que enviara señales erradas a los crueles espectadores,
Que no diera prueba alguna del amor que nos amarraba.
Fueron días sin risas, fueron noches sin besos,
Se renovaron las lágrimas cuando buscaba tus labios,
Escondí algunas palabras detrás de mis manos
Y guarde por un tiempo tu sonrisa de antaño.
Prendía una luz de esperanza al regalarme
A mi misma ese dicho de que el amor siempre triunfa,
Pero pasaron mañanas sin soles, sin ti,
Pasaron noches sin lunas, sin nosotros.
Fuimos una vez, recuerdo, la alegría del mundo,
Los tiernos ancianos esbozaban sonrisas al vernos de la mano,
Ellos reconocen un amor sincero, un amor honesto,
Los niños corrían tras nosotros para regalarles un beso.
El mar como toda las cosas, lleva consigo todas las cosas hermosas,
Y una tarde de primavera nos sentamos a ver las olas,
Recuerdo que mirábamos con asombro la belleza de las palmas,
Luego regamos nuestras huellas corriendo por la arena.
El mar y tu hacían buena combinación,
La brisa y yo éramos brillantes como el sol,
El viento y la marea llevan consigo los secretos del mundo,
Allí surgen de vez en vez dos corazones y un amor,
Unas caricias y algunos "te amo".
He perdido la cuenta hoy de cuantos sueños rondaban nuestros labios,
De cuantas locuras de vivir una vida juntos guardaban nuestras manos,
Conocí el amor un día en una trinchera de desilusiones y oscuridad,
Ví la luz cuando había perdido el recuerdo de que era tal cosa.
Poco a poco en las mañanas,
Al yo sacar mi libro, y tu enseñar tu guitarra,
Perdimos sin darnos cuenta un amor que solía ser para siempre,
Se fueron las miradas prohibidas que nos inventábamos cada mañana.
Las excusas vacías y sin sentido,
Me alejaron de tu lado y a ti del mío,
Nos arrebataron los encuentros imposibles
Que nosotros hacíamos naturales.
Me han robado las sonrisas de mis labios,
Me han encontrado llantos de noche sin querer,
Perdimos el amor de toda la vida,
Perdimos el sentimiento que solo se encuentra una vez.
Ya no te he visto por aquí,
No he escuchado de ti,
Y de vez en mes le pregunto a la luna,
Si te ha visto tocando tu guitarra por ahí.
Hacen tanta falta tus melodías,
Tus canciones sin acabar,
Las notas musicales que nos llevaban a alzar el vuelo,
Faltan los lindos rastros de un amor que comenzó en amistad.
Esta noche te he vuelto a ver,
Con unos años mas encima, te he visto mas apuesto que ayer,
Esta noche me llevo en los bolsillos sueños rotos,
Un amor perdido, me llevo canciones sin final,
Caricias sin tiempos, me llevo besos congelados
Y abrazos vacíos por el tiempo.
Esta noche ya no parece ser noche,
Esta noche ha vuelto a ser una trinchera.
La maldad y la oscuridad olvidada que una vez deje en un rincón,
Ha venido para cobrárselas a mis encuentros con un amor.
Y quizás me ames todavía, quizás yo te ame también,
Pero quedara solo como una melodía que no finalizo bien,
Quedara una canción sin titulo, como las que escribíamos sin un por que,
Se escuchara el eco de un amor que tomo vida en aquellos días del ayer.
Esta noche ha quedado dormida tu sonrisa guardada en mi recuerdo,
Y mi corazón, que es un océano de secretos, me dice que no te olvidare.
Esta noche te digo adiós para siempre, para siempre te digo adiós,
Y escuchare guitarras a lo largo del camino que me recordaran a ti,
Pero fue tu amor el único que revivió una muerte de un suicidio,
Esta noche te pierdo de vista mientras te pierdes en el horizonte de un nuevo sueño, un nuevo sueño que ahora vives solo..
Quedamos como lo que un día fue, como lo que nunca volverá a ser.
Por cuestiones de la vida tu encontraras a otra,
Por razones sin respuestas yo estaré con otro,
Yo en las tardes cantare para mis adentros tus melodías,
Y tu en las noches sonreirás pensando en las sonrisas mías.
Toda gran herida deja una cicatriz,
Ayer deje una vida para vivir un sueño,
Y esta noche dejo un sueño para soñar en vida.
Yo estaba moribunda en tus brazos aquella tarde en la trinchera.
Tu me diste vida y vuelo como a un pájaro de papel.
Aun sigo suscitando y surcando sin miedo los cielos.
Porque tu me diste el camino para volarlo contigo.
Pensé que entonces la marea te traería conmigo,
Pensé entonces que el viento me llevaría a ti.
Hoy caminamos caminos diferentes,
Pero aun nos abrazamos en nuestras almas,
Y toda melodía debe encontrar un final que a veces no esta escrito.
En un mañana mis manos cruzadas para siempre sobre el pecho,
Tus parpados cerrados, descansando en el sueño eterno,
Se unirán entonces tu alma y la mia,
Y vivirán juntas lo que una vez fue un sueño.
Ya para entonces no habrá maldad, no habrá envidia,
No habrán personas llenas de ira,
El amor nos dará un paseo por las estrellas del universo,
Y juntos terminaremos lo que faltaba de una melodía.
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