Huellas en la arena

Pensé que podriamos caminar por aquella playa al atardecer y sentarnos.
Recordar todo aquello que no pudimos hacer; por horas hablarnos.
En un suspiro sincronizado mirar el horizonte al mismo tiempo,
callar un "te quiero" y ahogarlo entre tantos olvidados lamentos.

Mis inolvidables silencios te colmarian de melancolia
y no podras resistir tu confesion de que me extrañas todavia.
Yo tomaria tu mano timidamente,
me quedaria en silencio recordando aquel "para siempre".

Pensé que tu aliento fresco me llevaria de vuelta al pasado,
pensé que ni tu ni yo habriamos cambiado.
Me preguntaba si aquello que ha terminado volveria a comenzar,
dijiste que las olas que iban necesariamente habian de regresar.

Dirias que siempre habra esperanza mientras haya vida
y después de tantos años tu boca me besaria.

Pensé que podia embriagarme de tu aroma
y que aquella coincidencia duraria toda una vida,
pensaba que sin importar cuantas veces te fueras, siempre regresarias.

El cielo aun era azul y tu cabeza estaba sobre mi regazo,
yo acariciaba tus cabellos pero no creia nada de lo que estaba pasando.

Pensé que esa vez yo seria mas fuerte,
que tus promesas no serian validas y tu amor no seria correspondido,
pensé que no caeria dos veces en la misma trampa, pensé que habia aprendido.

Esta tarde estoy sola en la misma playa de aquel dia
y siento su aliento salado en mis labios todavia.
Estoy viendo el horizonte, pero plenamente sola.
No tengo mas compañia que el sonido de las olas.

El amor suele acabarse cuando uno lo decide,
el otro se queda dormido y el sufrimiento lo reprime.
Lo guarda tan adentro, lo olvida de repente, lo manda a callar
y acaba sola escribiendo versos a la orilla del mar.

Y el me hizo daño tantas veces, su amor fue un martirio.
Pero aun tengo algo suyo, su corazon se quedo conmigo.
Ha vuelto a mi vida una y otra vez,
pero he decidido que no se lo devolvere.

Quiere amar de nuevo, quiere intentarlo.
Pero su corazon seguira conmigo y el no podra evitarlo.
¿Y nosotros? Ya es tarde, como una rosa en un jardin baldio.
Por su culpa mi corazon se ha quedado vacio.

Buscaba la redencion y la he encontrado,
tengo aire en los pulmones y puedo seguir andando.
Tomo un puñado de arena y sonrio de antemano,
recuerdo aquel romance de las noches de verano.

Los restos de nuestros abrazos y nuestros besos yaceran por siempre alli,
aunque yo me haya muerto y tu no vuelvas aqui.

Me levanto de la arena y sacudo mi vestido,
planeo empezar de nuevo y llenar lo que este vacio.

Entonces voy dejando mis huellas en la arena a medida que camino
y las olas poco a poco las van borrando,
asi yo emprendo el sendero a un nuevo destino
y te llevo como tristes recuerdos que iré olvidando.