domingo, 25 de abril de 2010

Boceto de una posibilidad

No es muy tarde, ¿Es muy tarde?
Si es asi, perdoname, solo quiero hablarte.
Anoche tuve un largo sueño contigo,
planteaba que lo nuestro tendria sentido.

Que llegaria a tu esencia sin darte cuenta,
que querer de nuevo te llenaria de fuerzas.
Las cosas serian un desastre pero, muy lentamente,
me instalaria en tus ojos silenciosamente.

De un modo sublime te acostumbrarias a mis palabras
y de un modo descarado demostraria que te amaba.
Y ocurriria todo en una atmosfera de timidez,
porque te quiero desde siempre pero eres incapaz de ver.

Que las estrellas de mis noches brillan
solo porque tu nombre me da esperanza,
que el sol en mi ventana sale
porque te he apostado con demasiada confianza.

No me quieras aun, de ser necesario, pero quiereme.
¿No ves que tiemblo con tu voz y tu presencia?
¿Que cuando me miras pretendo fingir indiferencia?
¿Que tengo miedo de que al saber la verdad,
te des la vuelta y no planees regresar?

Asi que prefiero callar el secreto para siempre,
quedarme amandote silenciosamente,
que seas tu la unica sonrisa cuando despierte
aunque tenga que mirarte sin que tu voltees.

Pero voy a esperar por ti
como el sol espera cada tarde la luz de la luna,
esperare pacientemente como el suelo anhela el beso de la lluvia.

Te esperare porque tengo todo lo que quiero excepto a ti,
eres lo que le falta a mi sonrisa para poder sonreir.

El tiempo es relativo y puedo esperar por tus manos,
por tus huellas, por tus besos podria estar siempre esperando.
Y si pretendes algun dia acceder a mi plegaria de espera,
te daré todo lo que poseo y aun buscare aquello que no tenga.

Y te entregare todo porque eres la razon de mi vida,
porque nada tendra sentido hasta que tu mano este en la mia.

Te has vuelto lo que mas quiero
y estoy dispuesta a esperar para siempre,
de pasar mi vida entera tomando tu mano en mi mente.

De rezar cada noche y humillarme durante el dia
porque se que por tu amor cualquier cosa entregaria.

Soy devota de tu aura y de tu presencia,
te quiero y aunque lo ignores tendré paciencia,
porque mi vida no tendra sentido hasta que no estés en ella.

Eres mi ilusion, mi sueño, toda mi idolatria,
pero se que no me perteneceras en esta vida.
Cuando seamos viejos, la muerte se acomode y se venza nuestra garantia,
te estare esperando, pacientemente, en las puertas del cielo todavia.

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